Dados algunos gastos que no son recurrentes de provisiones, y un crecimiento lento de la cartera de crédito, el banco se vio afectado negativamente. Sin embargo, estos gastos no recurrentes dejarán de pesar en el 2019, y se espera que la estrategia de colocar una cartera de manera más conservadora dé frutos en un escenario macroeconómico más positivo.

Por un lado, con la finalización en los recortes de la tasa de interés del Banco de la República, los bancos no tendrían más espacio para abaratar su costo de fondeo. Sin embargo, la mejor dinámica de la economía nacional permitiría un crecimiento más pronunciado en la cartera, lo cual ayudaría a mitigar el poco espacio que tiene el banco para disminuir el costo de fondeo.

Finalmente, el hecho de pertenecer al Grupo Aval le ha permitido al banco generar eficiencias, al compartir algunos gastos administrativos con los otros bancos del grupo, mejorando potencialmente los márgenes de la compañía. Así mismo, esperamos que las operaciones en Centroamérica empiecen a tener mayores eficiencias operacionales, dado que en comparación con las operaciones en Colombia, estas se encuentran un poco más rezagadas.